La felicidad está condicionada por muchas cosas en la vida para el hombre promedio, muchos la describen como una emoción que se produce en nosotros, al alcanzar alguna meta personal o éxito profesional, en realidad para los profesionales de la psicología, la felicidad es el bienestar interno o autopercibido que influye en la actitudes y comportamiento del individuo.
Los que viven este tipo de satisfacción o felicidad normalmente proyectan un enfoque positivo por dura que sea la situación; aparte de esto están siempre motivadas, les reta el saber que alcanzarán nuevas metas en la vida diaria profesional o de familia. Es de hacer notar que los que no somos felices nos cauterizamos por el lado de negativismo con el que vivimos a diario.
La felicidad podemos decir: es la vibra positiva del corazón a la mente, es esa energía que nos motiva a a seguir luchando y conquistando; pero, ¿Qué produce la verdadera felicidad? Muchos dicen que la autorealizacion, ósea alcanzar metas establecidas según la sociedad donde estamos viviendo o los tiempos por los que estamos atravesando.
Es difícil definir claramente lo que significa felicidad, pero casi todo lo que hacemos, es con el fin de lograrla y aumentarla o para evitar y disminuir la infelicidad. En lo personal leyendo la Biblia descubrí un hombre que atravesó tiempos difíciles por la decisiones que tomó en su vida como rey de Israel; como consecuencia de sus acciones atravesó un valle de amargura dónde realizó que ya no era feliz.
Pues David dejó de ser feliz cuando:
a- OLVIDO EL RESPETO A DIOS.
b- PREFIRIÓ LOS PLACERES QUE A DIOS EN SU VIDA.
c- CREYÓ QUE DIOS IGNORABA EL PROBLEMA DE SU AMANTE.
d- DERRAMÓ SANGRE ANTES DE TENER ARREPENTIMIENTO.
e- TRAICIONÓ A SU GENERAL DEL EJERCITO.
f- NO HONRO SU PACTO CON DIOS.
Nosotros también tenemos este tipo de problemas, nos hemos olvidado de todo lo que Dios ha hecho en nosotros; ahora resulta que creemos que somos importantes, imprescindibles, insustituibles y esto llenó nuestras vidas de orgullo y altivez de ojos. Cosas por las cuales la ira de Dios se derrama sobre sus hijos, volvamos hoy a ser felices; invitemos a Dios a nuestras vidas y proyectos de vida.
No olvides al Dios de tu salvación, antes que vengan los días en los cuales digas no tengo contentamiento..