¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.
Salmos 119:9
En el Salmo 119, la Torá se resalta junto con el número ocho, porque Dios quería comunicarnos un mensaje espiritual a Su pueblo a través del Espíritu Santo, que la Torá de Dios es eterna. La Torá de Dios será guardada por su pueblo por toda la eternidad cuando Dios cree los nuevos cielos y la nueva tierra.
La complementariedad entre lo divino y lo humano. Nuestra quinta letra del alfabeto hebreo es: ה y es conocida como la He, o la Hey. El significado de esta quinta letra del alfabeto hebreo es: La convergencia o encuentro, entre lo divino y lo creado
Guardar la palabra De Dios no garantiza que los obstáculos del camino serán removidos por Dios, esta es la garantía que un hombre como David nos narra en el capítulo más largo de la Biblia; un capítulo lleno de tanta sabiduría y buen consejo que es difícil no detenernos a leer y aprender.
Este hombre que nos recomienda guardar la palabra, en otras palabras, nos está sugiriendo memorizarla, aplicarla al corazón, compartirla, recomendarla. El poder de guardar la palabra es similar a lo que los humanos hacemos con nuestros ahorros, es tener algo guardado para el día malo, es contar con un respaldo en momentos de necesidad.
Después de haber vivido desprecios de parte de sus familiares al no ser tomado en cuenta para salir a la guerra, si no más bien ser enviado simplemente a dejar alimentos a sus hermanos, que sí estaban al frente de la batalla, David pudo marcar su vida y corazón a pesar de recibir haber recibido una herida tan profunda y difícil; y a pesar de este sentimiento que pudo haber estado presente durante su juventud y reinado hoy nos dice “guarda su palabra”.
Pareciera que estamos guardando las cosas equivocadas en nuestras vidas; cosas como recuerdos, ofensas, rencor, odio, y sin querer queriendo estas cosas están causando mucho daño a otros, es decir, a los que nos acompañan en la carrera de la vida que llevamos. No guardes las cosas equivocadas, guarda su palabra; es ella la que nos sana, ministra, transforma, anima, confronta y corrige. Es ella el camino a seguir, no importando dónde te encuentres hoy.
David está tan seguro de lo que nos recomienda en el Salmo 119:9 debido a que, entre otras cosas, el logró superar el asesinato de Urías, después de haber tomado a su esposa y embarazarla; él había pasado una terrible temporada de errores y pecado, situaciones que tomaron lugar quizá por el hecho de no haber sanado las heridas anteriormente mencionadas en este blog.
La palabra de Dios es poderosa, la palabra de Dios es vida, la palabra de Dios es la respuesta, la palabra de Dios es el camino, la palabra de Dios es lo que todo hombre necesita para salir de la zona donde hoy se encuentra; ella nos guiará, ella nos sanará, ella nos empujará, ella nos encaminará, ella es la salida que tú y yo necesitamos. No guardes las cosas equivocadas, guarda hoy la palabra de Dios y experimentarás sanidad.
No guardes rencor, guarda la palabra de Dios en tu mente, vida y corazón.