¡EL SALVADOR!

El Salvador será

El Salvador será un lindo
y (sin exagerar) serio país
cuando la clase obrera y el campesinado
lo fertilicen, lo peinen, lo talqueen,
le curen la goma histórica,
lo adecenten, lo reconstituyan
y lo echen a andar.

El problema es que hoy El Salvador
tiene como mil puyas y cien mil desniveles
quinimil callos y algunas postemillas,
cánceres, cáscaras, caspas, shuquedades,
llagas, fracturas, tembladeras, tufos.

Habrá que darle un poco de machete,
lija, torno, aguarrás, penicilina, baños de asiento, besos, pólvora.

  ROQUE DALTON.

 

 

 

Roque Antonio Dalton García (San Salvador, 14 de mayo de 1935- San Salvador, 10 de mayo de 1975), fue un poeta, ensayista, periodista, activista político e intelectual salvadoreño. Recordado por su vida bohemia y una personalidad jovial e irreverente. Dalton habría sido ejecutado en El Playón, una zona de restos volcánicos del volcán de San Salvador. Su cadáver y el de Pancho fueron dejados a la intemperie donde los animales salvajes los devoraron. Entre sus obras más importantes están: Pobrecito poeta que era yo…, novela, Las historias prohibidas del Pulgarcito, Siglo XXI, México, 1974. El Salvador, monografía, Casa de las Américas, La Habana, entre otras.

 

 

CAMINITOS DE MI TIERRA

Caminitos de Mi Tierra
polvorientos, ondulantes y apacibles.
Apenas caben los bueyes
cuando sedientos van aguar
al cercano arroyuelo…

Llévame por tus veredas
donde los grandes amates
son tus paredes,
los pájaros tu techo
y polvo tus cortinas.

Déjame abrirte paso
con el corvo, liberarte de la maleza y…
…darte vida, déjame caminar
por tus escondrijos,
tus montaña, tus valles
y riachuelos.

Sos tan viejo como mi gente
y tan ondulante cómo
el destino mismo…

Caminitos de Mi Tierra
déjame caminar de nuevo
en tus veredas antes que yo muera…

 

 

MI BELLA TIERRA

Tierra que me vio nacer…

Y me diste tus costumbres;
yo aún vivo de tus penas,
a ti escribo estos poemas,
y soy de tu muchedumbre.

Tierra de mi suelo lejano,
asoleada en faz tropical;
el mañana está cercano,
cuando sacudas tu mal.

Aún guardo las añoranzas,
Domingos hoy melancolía,
había esa luz de esperanza,
y esa Fe que te bendecía.

Yo nunca negaré soy tuyo,
mis sentires no me mienten,
si bien hermanos de orgullo,
ufanos dicen no te sienten.

Tierra que alberga mis sueños…

Hoy yo vivo entre abedules,
lejos de tu humilde diestra,
no hay petate, es seda y tules,
¡rubia bella!… pero siniestra…

Es sólo iluminada penumbra
la holgura en tierra extraña; esa
ingeniosidad suya deslumbra,
¡buen sabor!… pero alma aviesa…

Tierra que me vio crecer…

¡Marchan distantes tus pasos
marcando mi ruta Tierra Mía!
buscaré la paz de tus ocasos,
y reviviré el vocerío de tu día.

Son tus árboles ¡Tierra Bella!
tu brisa cálida del mediodía,
son tus noches de estrellas,
que hoy extraño en demasía.

Qué me importa me critiquen
por llevarte aún en mi corazón.
¡Yo dejo mis versos repiquen,
que siempre serás Mi Nación!

 

Amo mi tierra, amo a El Salvador.

 

 Fuente Cuscatlan.com