¡LOS QUE SE FUERON!

Somos muchos los que recibimos favores de Dios a lo largo de todo el año, desde pequeñas cosas como: la vida, la vista, el oído, la respiración; hasta grandes milagros y prodigios que se efectuaron en nuestras vidas. No cabe duda de que ha sido un tiempo de aprendizaje maravilloso, pero también un tobogán de emociones.

Son pocos los que realmente han logrado valorar estas cosas, cosas por las cuales muchos darían literalmente la vida; son pocos los que se detuvieron a dar gracias al Dios todopoderoso por las pequeñas cosas que consideramos propias, esas cosas de las cuales muchos dependen y pocos agradecen.

En el Evangelio de Lucas, se nos narra la historia de unos leprosos quienes recibieron el regalo de su vida; una segunda oportunidad había llegado después de su encuentro con Jesús, quien lleno de misericordia, les bendijo con la sanidad de su padecimiento que para esa fecha se catalogaba como la más impuro e irreversible en temas de salud (Lepra).

 

Diez leprosos son limpiados

11Yendo Jesús a Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea. 12Y al entrar en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos 13y alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros! 14Cuando él los vio, les dijo: Id, mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que mientras iban, fueron limpiados. 15Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz, 16y se postró rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y este era samaritano. 17Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?  18¿No hubo quien volviese y diese gloria a Dios sino este extranjero?  19Y le dijo: Levántate, vete; tu fe te ha salvado.

 

Lucas 17:11-19 (RVR1960)

 

Lepra: enfermedad infecciosa y crónica, causada por una bacteria, que se caracteriza por lesiones y heridas en la piel, las mucosas y el sistema nervioso periférico.

Se trata de una enfermedad infecciosa causada por un bacilo (el Mycobacterium leprae) que fue descubierto en 1873 por el doctor noruego Armauer Hansen. La lepra afecta principalmente a la piel y los nervios. La lepra se transmite fundamentalmente por el aire, penetrando por el aparato respiratorio.

 

Esta enfermedad, puede afectar la piel y los nervios de las manos y los pies, así como los ojos y el revestimiento de la nariz. En algunos casos, la lepra también puede afectar otros órganos, como los riñones y los testículos en los hombres. En fin, fue un gran regalo el que recibieron de parte de Jesús, prácticamente su vida les fue devuelta por medio de un verdadero milagro.

De los que fueron sanos, solo uno se quedó y volvió a Jesús para agradecer; lo que jamás esperó fue que sus oportunidades se triplicaron, en el sentido que volvió a ver a Jesús el hijo de Dios, como también el poder confirmar su sanidad física, y luego recibir la vida eterna. ¡Que bendición la que hay al permanecer en Jesús!, aun después de recibir lo que tanto anhelamos o estamos esperando.

 

Los que se fueron se lo perdieron. No seas de los que se van y abandonan; permanece en Él y juntos veremos la gloria y bendición de Dios en cada área de nuestras vidas; no encontrarás nada superior a lo que Dios ha hecho por ti y por tu vida. El regalo más grande de Jesús fue entregar su vida por ti en la cruz para que en Él, tú y yo tengamos vida eterna. No te muevas del lugar donde Dios te mandó.

¡No seas de los que se van!